Image
Image
Image
Image

Localidad: Barbadillo de Herreros

Distancia: 16,4 Ida y vuelta desde Casa la Sierra

29,6 Ida y vuelta desde Barbadillo

Altitud máxima: 1929 m (Torruco Zarzabala)

Altitud mínima: 1210 m (Casa la Sierra)

Desnivel: 719 m

Pendiente media: 8,8 %

Tiempo estimado: 4 horas desde Casa la Sierra

 

Salimos de Casa la Sierra, dónde es obligatorio dejar el vehículo, por el camino de La Secada, junto al río del mismo nombre, que corre entre hayas, salcedas, majuelos y serbales. El camino sigue siempre cerca del río entre las laderas cubiertas de matorral y alguna zona de pinar. Al fondo, en una revuelta, asoma la cumbre del Otero. Más adelante entramos en una zona de hayedo y llegamos al río Matabecerros, que podemos cruzar por un pequeño puente. Pasado el río aparece un tramo de gran belleza, con varios pozos y corrientes entre un denso hayedo que cubre la otra ladera y el fondo del valle. En el río es fácil ver truchas, pero no otro de sus habitantes, el desmán de los Pirineos, que también habita estas aguas. A nuestra izquierda dejamos una pequeña repoblación con jóvenes pinos. Después de unos 2km, llegamos a una zona dónde el valle se abre, en las praderas de La Secada. En este punto hay que tomar el camino principal, que asciende a nuestra izquierda, abandonando el que sigue por el fondo del valle. Desde una curva del camino podemos ver una de las más bonitas vistas de Barbadillo, la del valle de la Magdalena, con grandes hayedos cubriendo las umbrías de la sierra por debajo de la Cruz de la Demanda y Dos Hermanas y las vegas de La Secada con un refugio no lejos del serpenteante río. Pero continuamos el camino entre algunos jóvenes pinos y después entre una mezcla de pinos y robles en dónde aparece una encina, quizá asociada a las repoblaciones de pinos, ya que no es una especie propia de Barbadillo. Más adelante llegamos a una cerrada curva dónde se cambia de valle. Una nueva pista sale a nuestra derecha entrando en el pinar, pero nosotros continuamos el camino principal en la cuenca del Matabecerros. Es esta una zona querenciosa del jabalí y, si no hacemos ruido, es posible que veamos alguno. Junto a la pista, además de robles y pinos, crecen algunos serbales de los cazadores, que forman una bonita estampa con el San Millán de fondo asomando por encima de Campillos y el Hayedo de Carzolejas. En una curva del camino hay una zona más ancha para dar la vuelta con los vehículos y en ese punto se penetra en el Hayedo de La Losilla. Hay un tramo dónde se hizo una corta hace años y allí podemos encontrar numerosas fresas y frambuesas, aunque el hayedo ya se está recuperando. Poco después de entrar en el hayedo debemos tomar un camino que sube con una buena rampa a nuestra derecha. Por el seguimos entre las grandes hayas y pasamos muy cerca de un par de tejos, uno de gran tamaño. En poco tiempo llegaremos a un pequeño collado entre dos hayedos separados por un cortafuegos. Es por el cortafuegos por dónde debemos subir, hacia el norte. Ascendemos dejando a nuestra izquierda la cabecera del valle del Matabecerros, con la cumbre de La Piñuela como punto culminante y como raíz del circo glaciar de Los Carajones, en el que aparecen numerosos resaltes (escarpes de circo) esculpidos por el extinguido glaciar que ocupó ese lugar. A la derecha tenemos el valle de Los Aheditos, con los hayedos ocupando las vaguadas y el matorral las lomas. Al fondo quedan los hayedos de la Magdalena y las cumbres del Otero y Dos Hermanas. Pasamos el Collado de las Peteneras, dónde es fácil ver ciervos y corzos, descendiendo un poco, y volvemos a subir las últimas rampas del cortafuegos.